sábado, 14 de mayo de 2011

La sonrisa de Duchenne

Me desespero, te tengo en mente. Más de un mes, casi dos y ahora me acuerdo, te pienso... ¿qué hago? Decaigo, sonrío, imagino, vuelvo, recuerdo, miro, te miro... me desespero.
El silencio entre los libros ya se ha roto con risas en voz baja a las que los libros amenazan. Me quitas la silla, me  dejas caer al suelo... me pides perdón sin tener por qué. Me das lo que me hacía falta...te giro la cara, me quedo con las ganas, no te dejo. Lo siento, no puedo.

4 comentarios:

  1. Duchenne bueno, pero Duchamp y sus váteres son poco higiénicos
    En cualquier caso, ¿volvemos a las andadas?
    Fucking hell!!

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  2. Ficha, nunca dejé realmente de repasar mentalmente cada uno de los momentos que tientan al placer.

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  3. Y está bien, pero ojo con estudiar matemáticas si luego no vas a querer los quebraderos de cabeza que implican los problemas

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  4. "Repasar mentalmente" he ahí la clave. Sé que soy lo suficientemente egoísta como para querer las dos cosas, pero no lo suficientemente tonta como para no elegir la que debiera.

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